Este año distópico ha llegado a su fin y parece buen momento para sacarle brillo a los mejores buceos que he podido disfrutar en aguas de la Comunitat Valenciana.
Buen buceo en la Comunitat Valenciana
El buen buceo con que contamos en la Comunitat Valenciana tiene, como el buen vino, el buen jamón y todo lo bueno, diferentes grados. Y aunque cada uno tiene sus gustos y no tenemos porqué estar de acuerdo, el que suscribe quiere reivindicar las cinco inmersiones que más me han hecho disfrutar del buceo. Otro día hablamos del mejor snorkel en nuestras costas.
El escalafón no desmerece en modo alguno al resto de excelentes destinos. Es más, objetivamente seguro que hay inmersiones de más caché, con mucha más vida o espectacularidad…pero bueno, cuando algo nos hace tilín y nos resulta tremendamente satisfactorio no tiene porque ser siempre al devorar un pata negra: a veces el atribulado bocadillo de chorizo te deja más a gusto que el más caro de los manjares.

Buceo en Las Rotas de Dénia
Pero a lo que vamos, a la clasificación, que pondré por órden cronológico y no por ranking entre ellas. La primera, que tuvo lugar en los primeros días del año fue en Las Rotas de Dénia, en el sitio conocido como Freskito, recurrente lugar de peregrinación de buceadores y caballo de batalla para los lugareños que no se cansan de reivindicarlo como un punto de buceo libre, fuera del corsé castrador de la reserva que excluye, en la práctica, a los buceadores de un espacio del que siempre han sido los mayores valedores. Pero bueno, ese es otro tema.
El día de la inmersión el agua estaba como un gintonic, muy fría y muy transparente, pero sobre todo muy acogedora, llena de vida y transmitiendo sosiego y serenidad. El mejor comienzo del año sin duda.
Inmersión en Xàbia
En segundo lugar la inmersión que tuvo lugar en la cara sur del cap Prim o lo que es lo mismo, cabo de San Martín, en Xàbia. Esta fue en febrero y con un agua igual de fresquita, con muy buena visibilidad, montones de animales por doquier y un paseo por la gruta que comunica las dos caras del cabo y que nos daba paso a la más conocida inmersión de la cueva de la virgen.

Buceo en Columbretes, una apuesta segura
Luego vino Columbretes, otro icono del buceo en España que nunca defrauda y que aúna la belleza serena del entorno volcánico de pequeñas islas con la explosión de vida de sus fondos, donde todo es de calibre XL y ningún animal huye de los buceadores; esa es la relajación que transmite este sitio que siempre me hace pensar lo privilegiados que somos los que podemos acercarnos a disfrutar de este pequeño archipiélago.
Gandía, una sorpresa para el buceador
En cuarto lugar quiero reivindicar Gandía como lugar de buceo. Este es uno de esos sitios donde, como sucede en buena parte del litoral de Valencia, uno no espera nada espectacular, es más, no espera casi ni que haya buceo. Y es por eso precisamente, por la ruptura de las expectativas por lo que me resultó fascinante la inmersión. Agua transparente, calmada y con mil motivos de interés, desde pequeños peces como castañuelas y bogas hasta gorgonias y nacras. A la felicidad por la sencillez. Espero volver a tener ocasión de sumergirme en sus aguas.

Sumergidos en la Llosa de Benidorm
Y finalmente, ya en noviembre, un must en esto del buceo en la Comunitat Valenciana, la Llosa de Benidorm. Excelente como siempre, pero ese día era explosiva la cantidad de peces. El agua a principios de noviembre está mejor que en verano. Acogedoramente templada, no te dan sudores al pensar en ponerte el traje, no pasas frío en el agua y el resto de condiciones para bucear como la menor presión de usuarios, embarcaciones, comodidad en los centros de buceo etc., hacen que si todo lo demás va bien, te salga una inmersión redonda.

Pues eso, grandes inmersiones y sobre todo muy buenas satisfacciones del buceo de un año que por casi todo lo demás, merece que con urgencia desterremos al olvido.