El traje de neopreno es uno de los elementos básicos del equipo de buceo, y también un complemento muy interesante para la práctica del snorkel.
Protección térmica con el traje de neopreno
Tanto para la práctica del buceo como del snorkel usamos a menudo el traje de neopreno, un material elástico denominado que se caracteriza por contar con miles de pequeñas celdas o cavidades huecas que alojan aire. Los trajes de buceo se pueden confeccionar con otros materiales pero son mucho menos empleados, como la goma o tejidos laminados.

La función del traje es muy importante y diversa. En primer lugar actúa como aislante y protector frente a la pérdida de temperatura corporal y es que, por caliente que esté el agua del mar (y que en nuestras latitudes no sube generalmente de los 29 ó 30 grados), el cuerpo humano siempre tiene una temperatura mayor, entorno a los 36º de modo que siendo el agua un medio extraordinariamente conductor de la temperatura (sobre 20 veces mejor conductor que el aire), la transferencia de temperatura será rápida, de modo que habrá que hacer algo para frenar la pérdida de calor corporal y su cesión al agua y ese es el primordial papel que cumple el traje de neopreno. También en snorkel usamos el traje de neopreno y otros elementos que podéis consultar en la guía de snorkel.

El traje (salvo los secos) no impide la entrada de agua al cuerpo, pero sí dificulta mucho su renovación de modo que el agua que nos entra es una delgada capa que queda entre nuestra piel y el traje y que es fácilmente calentada por el calor corporal que desprendemos. Para mantener el confort térmico sólo habrá que evitar la renovación excesiva de esta delgada película.
Traje de neopreno húmedo, semiseco y seco
Los trajes pueden ser de 3 tipos: húmedo, semiseco y seco. El más frecuente y generalizado es el traje húmedo, que puede ser de una pieza (tipo mono) o bien de dos (un peto y una chaqueta e incluso un mono y un sobretraje corto que usaríamos encima del mono en invierno y podríamos usar como traje en verano). El traje húmedo suele tener entre 3 y 7mm de grosor, obviamente a más grosor mayor protección térmica, aunque el más habitual es el de 5mm.

En el siguiente nivel de protección térmica tenemos el traje semiseco que es un traje tipo monopieza como el húmedo aunque cuenta con una cremallera especial que dificulta todavía más la entrada de agua. Suele ser de 7mm de grosor y contar con unos acabados a nivel de costuras y manguitos de las extremidades (muñecas, tobillos y cuello) especialmente sellados para dificultar la entrada de agua por estas zonas.
Siempre protegidos con el traje de neopreno
Finalmente podemos encontrar el traje seco que cuenta con una cremallera y acabados del tipo semiseco aunque aquí impiden la entrada de agua. Es menos habitual en nuestras latitudes aunque cada vez se ve más en invierno. El traje seco cuenta con una válvula que se conecta a través de un latiguillo a la botella de aire de modo que a voluntad, el buceador le puede insuflar aire para así crear un capa entre la textura del traje y la piel, aunque casi siempre llevaremos puestas unas prendas de algodón o similar para que nuestro cuerpo esté perfectamente caliente.

Gran variedad de trajes de neopreno según la tempertura y condiciones meteorológicas. A quien quiera comprarse un traje de buceo y no vaya a hacer un uso muy intensivo le recomendaría un traje convencional de 5mm, mejor de 2 piezas porque entonces, con agua más fría, tendría a nivel del pecho protección de 10 mm al solaparse el peto con la chaqueta. Y si buceas mucho y en invierno, un semiseco de 7mm. No hace falta más.
